AUTOBIOGRAFÍA

Agustín Olmedo Dorado

Autobiografía:

Mi nombre es Agustín Olmedo Dorado, de origen español y nacido en Antequera (Málaga) el 15 de marzo de 1992, viviendo desde entonces en la localidad de Fuente de Piedra, en el seno de una familia media.

Desde que era tan solo un bebé, mis padres Agustín y Mª Teresa estuvieron muy presentes en mi educación creativa. Los números y las letras, además de la pintura, formaron parte de mi día a día. Cuando entré en el colegio me sentí preparado para avanzar, guiado por mi prematura experiencia.

Durante esa etapa, cuando tenía ocho años, la vida decidió regalarme un hermano con el que jugar y compartir mis conocimientos. Y a partir de entonces todo cambió y con el cambio, llegaron nuevas experiencias.

Tras finalizar mis estudios de educación obligatoria, el siguiente paso era el Bachillerato de ciencias que termine con éxito, entrando posteriormente en la universidad de Málaga de Ingeniería Informática, en donde adquirí importantes conocimientos, abriéndome las puertas de la imaginación en muchos sentidos. Por desgracia, debido a un accidente y a una inesperada operación, caí en un bucle en el que perdí parte de mis estudios y mi condición física. Después de lo ocurrido, me vi obligado a dejar la universidad a un lado por estos motivos, y por la cara sustentación de la misma, por lo que tuve una vez más que cambiar en mi profesionalidad.

Con veinte años, regresé de nuevo a mi antiguo instituto de Bachillerato en Antequera, en el que llevé a cabo mis estudios de Grado Superior en Administración y Finanzas. Sin embargo y tras terminar los mismos, me di cuenta de que realmente no era lo mio. Es más, nada era lo mio. Y como todo en esta vida, regresé al comienzo de mi vida para averiguarlo. Fue entonces cuando brotó mi etapa filosófica, cuando decidí estudiar más allá el significado de la vida y de mi ser.

De todas las respuestas, hubo una de ellas que me definió completamente. Mi verdadero oficio, aquello por lo que me sentía más realizado era la creación de todo tipo, pues dar de sí mi imaginación era aquello que más deseaba. Fue entonces cuando comencé a plasmar mis ideas, y uno de los medios más importantes para hacerlo fue mediante la creación de libros .